PRAGA

El 20 de Abril salió de Laguna la expedición de alumnos de 1º de bachillerato hacia Praga. Había sido difícil llegar hasta allí, pero puntuales casi todos a las 5:30 nos encontramos en el autobús.

El buen rollo flotó constantemente entre nosotros durante los 5 días. Siempre paciencia, buenas caras y ganas de pasarlo bien.

La verdad es que todo fue fácil. Desde nuestra llegada, donde la guía ZDENIA, nos esperaba en el aeropuerto para facilitarnos al máximo todos los pasos que diéramos durante nuestra estancia en Praga.

El hotel situado en el centro era bastante original. Las habitaciones con literas estaban bastante bien, quizás para algunos algo "minimalistas", pero lo importante era el buen ambiente juvenil que había.

La primera tarde del sábado no la quisimos desaprovechar y paseamos cerca del río, pasando por el mítico puente de Carlos. Lo mejor un cafecito caliente en un local con encanto.

Al día siguiente Zdenia nos tenía reservado un día apretado para ver todo lo que nuestra paciencia y nuestras piernas pudieran aguantar de la maravillosa ciudad de Praga. Castillos, historia, arte, y también algo de sensibilización. Todo acompañado de una buena comida típica en el centro, todos juntos.

El lunes nos esperaba Karlo Vivari, una ciudad balneario con ese aire tan decadente y romántico del esplendor de primeros de siglo. Todo nos gustó muchísimo, las fuentes termales de agua caliente y sabor extraño, los dulces típicos (como obleas) y también nuestra comida tranquila en un restaurante italiano.

A la vuelta hubo tiempo de volver a disfrutar un ratito de la noche Praguense.

El martes fue sin duda el día más duro, desde mi punto de vista. La visita a Terezin conmueve muchísimo. No te puedes quedar impasible al contemplar toda la barbarie que allí se cometió. El campo de concentración es escalofriante, pero la visita a la ciudad amurallada tampoco te deja mucho mejor. La verdad es que el día era soleado y eso nos levantó al final el ánimo a todos.

La noche fue una locura con ganas de aprovechar los últimos momentos, algunos ni pudieron dormir.

El balance muy positivo. La gente puntual, cumplidora y siempre amable. Ha sido un gustazo disfrutar de una ciudad tan bonita con unos alumnos tan estupendos.

gracias de verdad.